viernes, 8 de agosto de 2008

Nunca dejés de sonar...

Leyendo algunos blogs de unos amigos, me he dado cuenta que el soundtrack de la vida sigue. Y con más ganas. Canciones para divertirnos, recordar viejos momentos. Seducirnos, como aquella figura pintada semidesnuda en el sillón de la casa en un domingo viendo la TV. Inigualable escena como la describe Juan Pablo en su play list para seducir o ser seducido.

Aquellas que nos recuerdan tabuladores para aprender a tocar la rola, y que de paso son desgarradoras sentimentalistas de la vida. Rolonas como diría Allan. O con un nombre más poético, dulce melancolía, como la bautizó Wendy.

Que hay del dance y aquellas que nos dan miradas seductoras. Que te congelan. Que te impacientan. Que te emocionan y hacen arrancarle la ropa, morderla, acabarla. Una escena patrocinada por la lista de Lepe. O bien aquellas que nos recuerdan a nuestros amigos, como la que hizo Edgar.

Me uno a la lista, vamos a ver que nos deja. Tengo varias para recordar, seducir bajo la lluvia, para esos días de insomnio a las 3 de al madrugada, o una lista de Untitled. O bien de las películas que nos dejan algo. Hay canciones para todo. Ojalá y esta rocola que nos une, nunca deje sonar.

Que tal una para la madrugada...

*Ramalama (bang banng) para quitarse el sueño de una vez de Roisin Murphy. Una sicodelicía canción que nos hace recordar aquellos sonidos de las pesadillas al estilo Disney. Irónico no, para comenzar.

*Eanie Meany, para saber que podemos seguir siendo niños y escoger. De Jim Noir. Por 2 minutos aunque sea.

*Dreams. Sin ellos creo que seríamos egoístas en pensar que no se pueden cumplir. Y por que no pensar en encontrarnos en uno de vez en cuando. De Deep Dish. Soñemos por 4 minutos

*Metamos también a The Cure con Close to me. Un poco de la melancolía que se apodera a eso de las 3:20 a.m.

*Ignoremos la melancolía, pero no nos deshagamos de ella, para eso esta rola de Gnarls Barkley, Crazy.

*Igual al final necesitamos una para comenzar a cerrar los ojos, que tal Sweet Lullaby de Deep Forest.

*Y para decir dulces sueños, Somewhere over the Rainbow de Israel Kamakawiwo’ole con la guitarra suave al estilo hawaiano. Se acercan las 4 a.m. para esa hora, otra lista.

Dale un chance talvez te sirva para quitarte de por medio esas pesadillas que nos atormentan de vez en cuanto. Dulces Sueños Raquel... [click en los nombres de las rolas para escucharlas]

[del 8 del 8 del 8, será que hoy es el día internacional del chavo del 8]

*
nuevamente me pongo mis audífonos y recuesto mi cabeza en la almohada. Sonrío y me dejo llevar en compañía del iPod melómano que no deja de sonar.

1 comentario:

David Lepe dijo...

Que bonita tu entrada pato... snif.