Sentado frente al monitor quería escribir de mis últimas experiencias en una butaca de cine. Contar de mi ida a ver Hancock y The Clone Wars, pero caería en estar haciendo una bola de nieve de lo actual, de lo moderno. De lo in & out. Y yo no soy de esos. Por el momento no.
Si voy a mencionar otra película me gasto las líneas y su tiempo en una buena.
Recuerdo una conversación que tuve con una amiga mientras íbamos en mi carro y me dijo, “que buen soundtrack suena” y dije... “como debe de ser la vida”. Esa vez iba sonando la melodía, el soundtrack de la película London, hecho majestuosamente por The Crystal Method. Película en la que actúa Jessica Beil que nos deja soñando. A mi criterio es una película muy buena. Poco comercial y recomendada a aquel que se interese por ella.
Hasta donde puede llegar la adicción por algo que nos seduce, no sólo las drogas químicas nos hacen adictos, también la seducción el olor de una mujer, o hombre, según las preferencias de cada quien, nos absorbe. En London nos demuestran eso. Una historia de amor y sus víctimas. Conversaciones y situaciones que van relacionadas con el amor y con el rush que un jalón de coca te puede dar. Que tanto podes aguantar, cuantos podes soportar. Quien da el primer paso y quién da el último. London es el ejemplo del disfraz de oveja en el cuerpo del lobo para decirnos... casualmente sos un adicto.
Todos somos adictos al amor, nadie quiere decir, “hola mi nombre es Luis Roberto Molina Gómez y soy adicto”, nadie quiere entrar en rehabilitación por que quieren seguir viviendo el rush. Nadie quiere cambiar de droga, por que la que está utilizando en ese momento te vuelve feliz. Nadie quiere decir que es un consumidor. Nadie quiere decir que tanto la necesita y en que cantidades.
Vean la película, no les va a cambiar el mundo, tampoco les va a dar una guía para el amor. Solo va a poner palabras que siempre hemos querido mencionar.
Casualmente el afiche de la película dibuja el nombre con líneas de coca. El amor puede ser una adición, puede intoxicar. Pero nadie ha negado que rico es consumirlo.
El amor es igual que la coca, es perfecta para el rush. Comparto lo que dijo Trent Reznor en una oda a la cocaina, la cual se la dedico a estas adicciones: take me with you, without you everything just falls apart, it's not as much fun to pick up the pieces.
La habitación de al lado
Hace 3 días
1 comentario:
Me encanta esta canción, y el video... Buena elección!
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