El lado oscuro de mi corazón

[una conversación mental conmigo mismo cuando oigo este poema de Oliverio Girondo]

“Me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo; Será cierto, será que de verdad no veo como los tiene una mujer. Los veo y me encantan. No puedo creer que no me importe. Cuando caminan me gusta mas observarlos, no digamos cuando corren el movimiento que toman. ¡Qué gran mentira! pienso en el futuro como caerán, como perderán su forma dura y cuan encantadora. un cutis de durazno o de papel de lija.¿ Qué acaso no veo su rostro cuando se asoma frente a mis ojos? No es lo primero que veo si es fea o bonita. No veo sus ojos, como se dibujan sus cejas, sus pestañas. No me importa como su mirada seductora me ve, buscando encontrarla. Será que no importa cuando pienso en los años que vendrán, como en su rostro se dibujaran carreteras de arrugas, manchas que parecerán islas o una mirada que se cubrirá por dos vitrinas… ¿será cierto que me importa un pito esto? Le doy una importancia igual a cero al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o insecticida. Ajá me imagino sintiendo un beso en la mañana con olor a centavo. Si por eso mejor me hago el dormido y me despierto tarde. Y bueno quien no se levanta y lo primero que hace es lavarse la boca. O que se aguantan su aliento, vamos no jueguen así con nosotros. Importancia cero será mi huevo. Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias. Nombre, me imagino que cuando las bese me podrían sacar el ojo. O peor aún que no la pueda ver a los ojos cuando este hablando con ella por que… ajá su nariz me va a distraer todo el tiempo. Pero eso sí, y en esto soy irreductible, no les perdono bajo ningún pretexto que no sepan volar, si no saben volar pierden el tiempo conmigo” en esto si estoy de acuerdo. No puedo creer que alguna mujer no quiera por un momento desprenderse. ¿Alguna de ustedes tiene alas?, se cree angelito caído del cielo. Por que estoy dispuesto a viajar to the moon and back. Y tal vez no me den ganas de regresar. Qué… ¿me acompañas?

¡Buenas noches!